Desde el momento en que somos padres, son muchas las cosas que cambian en nuestra familia, y los viajes no son la excepción. La clave es pensar el viaje en función de la familia, tratando de compatibilizar los intereses de todos los miembros.

Organizando el Viaje

Si bien alentamos a viajar en familia, también debemos considerar algunas cuestiones que harán que el viaje sea de disfrute para todos.

Si hablamos de viajes en avión, es primordial priorizar los tiempos, es decir, si el destino elegido cuenta con un vuelo directo y otro con varias escalas por unos pesos menos, al viajar con niños siempre el consejo es aprovechar los vuelos directos. La diferencia económica en el pasaje muchas veces no es tan significativa como los gastos que tendremos en las esperas en los aeropuertos y el estrés que irá en ascenso.

Si el interrogante es el destino, es bueno pensarlo en función de las actividades que podremos realizar, siendo realistas respecto de los tiempos de traslado, de descanso e integrar actividades que a los chicos les interesen. Los destinos de playa son especialmente familiares pero las ciudades también tienen muchos sitios ideales para compartir entre todos.

¡Tenemos buenas noticias! Muchos hoteles en Caribe y Brasil disponen de muy buenas políticas de planes familiares ( también llamados Family Plan), por los cuales se pueden tomar hasta 2 menores sin cargo, abonando el costo de la habitación. Contar con un buen asesoramiento respecto de las características del hotel, las distancias a los puntos de interés  y las actividades es fundamental a la hora de la elección.

Son muchos los hoteles familiares que cuentan con personal especializado para que los chicos puedan disfrutar mientras los adultos toman un pequeño break. Las piscinas infantiles, parques acuáticos y mini clubs para niños están a la orden del día, y los chicos rápidamente se vinculan entre ellos, sin importar el idioma o la nacionalidad. Los mini clubs suelen estar segmentados por edades, con actividades para todos función de sus intereses.

Contratar un seguro de asistencia al viajero nos brindara una dosis de tranquilidad imprescindible para emprender el viaje de la mejor manera, sabiendo que ante cualquier imprevisto, seremos atendidos por profesionales, y no tendremos sorpresas.

¡Comencemos!. En primer término, para viajes en avión,  si el niño tiene menos de 2 años ( siempre regresando antes de cumplir los dos años),  se toma sin cargo en los vuelos por el interior del país y un monto mínimo si se trata de viajes internacionales. En cambio, desde los 2 años a los 11 años ( siempre antes de cumplir los doce) abona un 75% del monto total del pasaje.

Los bebés en el avión no tienen acceso al asiento sino que van en faldas del adulto, o bien si el bebé es bien pequeño, algunos aviones disponen de unas mini-cunas que se adicionan en el primer asiento.

Es normal que al viajar con un bebe no se pueda realizar el web check in, ya que algunas lineas aéreas lo restringen, asignando el asiento en el aeropuerto. Recomendamos no despachar el carrito junto con el equipaje, sino quedarse con el carrito durante todo el proceso, ya que son varias horas que debemos esperar hasta subir al avión, y entregarlo directamente al subir al avión.

Al embarcar al avión, una azafata nos traerá un cinto especial que se adiciona al nuestro para mantener seguro al bebe, especialmente durante el despegue y el aterrizaje.

Si el pasajero lo desea, solemos solicitar la comida de bebé ( que suelen ser papillas) o niño, que suele ser algún sandwich o comida sencilla. Para los momentos de despegue y aterrizaje, es bueno que el bebe beba algo, succione su chupete o si es lactante, aproveche ese momento para poder relajarse y descansar.

Durante el Viaje: Actualmente, los aviones vienen equipados con muchísimo entretenimiento a bordo, y si el viaje es en bus, llevar una tablet o reproductor pórtatil suele ser de ayuda para mantener a los pequeños entretenidos, además de los clásicos libros, revistas para pintar y ese juguete que lo acompaña en la noche.

Si se trata de un destino de playa, la protección solar es de suma importancia, por lo que recomendamos un factor de protección alto, junto con gorros y ropa de color claro. En cuanto a la alimentación, el agua mineral nos debe acompañar en todo momento, para evitar deshidrataciones y malestares.

¡Solo nos queda disfrutar! Viajar nos encanta y a los chicos también..Compartir momentos que quedarán por siempre..Lo vivido en los viajes permanece en nuestra memoria ¡y en las fotos con nuestros peques!

En Barbieri Cunill te asesoramos para que viajar con niños sea posible y un éxito!

Consultanos:

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( 0223) 496-3111

 

 

 

 

 

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